martes, 27 de febrero de 2018

Tenebrosa bruja de amor


Tenebrosa bruja de amor


En el mundo de una  bruja ser mariposa no es su ideal porque siendo una soberbia de la esclavitud un sueño no es más que una torpeza bestial, buscar su corpulento galán de flor en flor, bebiendo su néctar dulce de hombría en la sombría, solo lo lleva a raptar como víbora del infierno en un suelo que no es suyo y que aunque no tenga fuego la quema y corta en la plenitud de la pureza antónima a ella. La princesa no está triste y sí tiene sentimientos amigo Rubén y existen ocasiones querido Bécquer en las que las golondrinas por más absortas, oscuras y enamoradas que estén  de la Magnolia se dignan en su distanciamiento veraz. Y es así como la bruja fue decapitada con la vista, violada con el aliento, ahorcada con el canto y ahogada etéreamente con el amor. Su soledad no se distingue por algún movimiento literario o por la época que se acontece y peor aún es el espejo de la autora; es simplemente una bruja en busca de su último ósculo que el prodigioso pensamiento se lo dará en el vacío del cúmulo gentío, tomados por la ignorancia de amores de papel, al que siempre pretendió dar un abrazo con un corazón vacío pero lleno de mortíferas bendiciones.


Rosita Quiroz Catuto 

Sonatina de Rubén Darío - La princesa está triste, que tendrá la princesa

Pavor

Me he enamorado como bestia de la sangre, he maldecido la felicidad por no tenerla así como las hormigas ingratas odian la lluvia de la q...